PANTORRES, S.A. fue fundada en 1988 como sociedad dedicada a la elaboración de pan cocido.

No obstante, sus inicios se remontan a finales del siglo XIX con una pequeña tahona familiar situada en Torres de la Alameda. Conocidos por todo el pueblo, es en 1960 cuando toma su primera denominación como sociedad “Viuda de Luciano Polo” consiguiendo una gran popularidad y aceptación gracias a sus excelentes panes candeales. Posteriormente pasó a denominarse Hermanos Polo, C.B. cuando sus descendentes heredaron la tahona y, más tarde, Panificadora de Torres, S.A. 

 

Así, pasó de generación en generación hasta llegar a 1988 donde, de nuevo, los descendentes que hoy representan la cuarta generación de panaderos, deciden asociarse y marcar el antes y el después en la historia de la pequeña tahona. 

 

Dar el salto de panadería familiar a panificadora industrial implicó la construcción de una nave con una superficie de cocción considerable, para poder abarcar la creciente demanda por parte de nuevos clientes. Asimismo, existía la necesidad de hacerse un hueco en el mercado autonómico, en aquel entonces más limitado, pero en expansión.

 

En el año 2000 se lleva a cabo una ampliación de la superficie construida debido al gran salto que experimenta la empresa en esos años y, así, poder mejorar la calidad de sus productos y seguir creciendo. Es entonces cuando PANTORRES, S.A. empieza a elaborar pan de molde y panes de hamburguesa y perrito. 

 

Uno de sus mayores avances fue desarrollar en 2009, tras algunos años de ensayo – error, su propio fermento natural, para así crear una Masa Madre única con la que elaborar todos los panes. 

 

Un año después, PANTORRES, S.A. inicia la producción de pan precocido debido a la gran demanda por parte de los establecimientos de este tipo de pan. Al estar cocido en dos fases, su preparación es más rápida y el segundo horneado requiere de 10 a 15 minutos. Esto beneficia a los puntos de venta ya que les permite cocer según demanda y disponer siempre de un pan recién hecho que conserva las mismas características que el pan habitual de una sola cocción. 

 

Desde 1988, se han sorteado algunas etapas más difíciles sobre todo a nivel económico, pero superando todas ellas con creces y saliendo más reforzados. El empeño y esfuerzo de todos sus integrantes ha conseguido posicionar, a día de hoy, a PANTORRES, S.A. como una de las panificadoras más potentes de la Comunidad de Madrid. 

 

Con un total de 10 hornos, 2 de ellos de solera reflectaria, PANTORRES, S.A., es una de las principales empresas de referencia para los establecimientos de hostelería, supermercados y pequeñas panaderías, tanto a nivel calidad como en la gran variedad de productos. Asimismo, suministra pan a distintos hospitales como el Hospital Príncipe de Asturias y el Hospital de Guadalajara, así como a residencias de ancianos, colegios y demás dependencias pertenecientes a la Comunidad de Madrid y Castilla La Mancha. 

 

El pasado año se llevó a cabo una nueva ampliación, esta vez de las cámaras de congelación debido al gran volumen de fabricación de pan precocido, con una demanda cada vez mayor, y, por tanto, la necesidad de aumentar su espacio de conservación. Además, se realizó una gran renovación de la maquinaria y de las amasadoras, así como la instalación de un centro de microingredientes que permite la automatización de las recetas, de modo que el empleado no tiene que estar pendiente del pesado de los ingredientes, pudiendo desempeñar otras tareas. 

 

Actualmente PANTORRES, S.A. tiene 15 rutas diarias por toda la región de Madrid, así como zonas de Castilla La Mancha, Extremadura. Algunas de estas, cuentan con 3 viajes en distintas horas para poder abastecer del pan más reciente a todos sus clientes.